[dropcap]E[/dropcap]l joven actor, Nicolás Camacho, hijo de la primera actriz Esther Orjuela, recordada por las telenovelas “La Fiera”, “Las Amazonas”, “Lejana como el viento”, “Natalia del Mar”, entre otras; regresó a la pantalla de televisión en la producción dramática de Venevisión, “Corazón Esmeralda”, para interpretar al bohemio ecologista, Abraham.
La infancia de Nicolás siempre estuvo ligada al arte, tanto por su madre, como por un interés innato. Inició sus estudios dramáticos en el año 2011 en la Escuela de Teatro Musical Lily Álvarez Sierra, y un año después, debuta en Venevisión en la exitosa telenovela “¡Válgame Dios!” [2012].
¿Cuándo nació tu pasión por el medio artístico?
Siempre he mirado con admiración lo que los artistas son capaces de hacer. Cuando veía de pequeño una actuación brillante, una pieza musical excelsa o un baile magníficamente ejecutado, pensaba, “¡Yo quiero estar allí!, ¡Yo quiero hacer eso!”.
¿Consideras que heredaste la vena artística?
Mi madre es una actriz grandiosa, así, que sí, lo artístico vino en la sangre. Siempre he sentido la necesidad de aprender cualquier cosa que involucre al arte, y aunque ella siempre prefirió que me enfocara en mis estudios, se encantaba con la idea.
En esta ocasión interpreta a un apasionado joven ecologista que trabaja en «Planeta Verde», junto a Beatriz [Irene Esser], Liliana [Carmen Alicia Lara], Johanna [Andreína Carvo] y Luis David [Cristóbal Lander]. “Junto a ellos trata de convertir a Valle Bonito en un lugar más verde”, señala el actor. Es un buen muchacho, le gusta ayudar al que lo necesite, noble, amigo incondicional, pero bastante despistado, “es muy distraído y relajado, sin embargo está centrado en sus metas y proyectos”.
¿Qué haces para cuidar el medio ambiente?
Fijarme en las acciones que hago diariamente por hábito. La mejor manera de ayudar, es empezar por analizarse a uno mismo.
¿Podrías contar alguna anécdota que haya ocurrido en alguna grabación de la telenovela?
Una anécdota personal que me causa gracia, es la vez que me citaron para grabar a la una de la tarde y terminé haciendo mi escena 15 minutos antes de la media noche. Afortunadamente había un libro interesante entre la utilería… si tan sólo lo hubiese visto antes de las once… (risas).
Ya finalizaron las grabaciones de “Corazón Esmeralda”… ¿Qué viene ahora?
Continuar interpretando a Andrés en las funciones de la obra “Los Polvitos de Andrés” en el Teatro Chacaíto, y seguir estudiando y mejorando cada vez más.
¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?
Leer.
¿Un sueño por cumplir?
Más que sueños, los veo como objetivos o metas… Y sí, tengo muchos planteados por cumplir, entre los cuales está el constante crecimiento en todos los ámbitos que me atañen.
Finalmente… ¿De qué color sientes tu corazón?
Azul cielo… porque representa tranquilidad, estabilidad y armonía; siempre que se esté en equilibrio, la mente y los pensamientos estarán en consonancia con los anhelos más profundos.