[dropcap]E[/dropcap]l cantante llegó en la mañana de hoy al Tribunal de Bayamón para afrontar un caso de violencia de género, tras un incidente protagonizado con su pareja Rebeca López.
William Omar Landrón Rivera -quien pagó una fianza de 600 mil dólares y se encuentra bajo supervisión electrónica- acudió a la sala 706, de la jueza Janet Perea López, en compañía de su abogado Irving Prado Galarza.
Perea López determinó que Don Omar podrá salir de su vivienda de lunes a sábado, de 7:00 de la mañana a 8:00 de la noche, mientras que los domingos deberá permanecer en su domicilio.
A su vez, la vista fue reprogramda para el próximo 14 de octubre, después de que López Zambrana no se presentóara a la vista y se señalara que padecía problemas de salud.
El cantante, de 36 años, afronta cargos por violación a la Ley de Armas e infracción a la Ley de Violencia Doméstica, despúes de que amenazara a su expareja supuestamente con un arma blanca y a través de mensajes de texto.
Pese a que no dio declaraciones, a través de la red social Twitter Don Omar dijo que “tengo la capacidad de dejar todo atrás, sin aferrarme, sin rencores, pues de lo único que estoy seguro es que lo mejor está por venir”.
En otro mensaje, expresó que “apreciaré siempre más ser traicionado y aprender, que ser engañado y vivir en ignorancia”.
Mientras, López se encontraría en Washington y ya había anunciado a través de la red social Facebook que no estaba dispuesta a seguir con el caso.
La perjudicada escribió en su portal de Facebook una nota en la que declara que “uso este medio con la única intención de dejar saber mi sentir y mi decisión. A mis 26 años, he vivido momentos de alegría y tristeza, pero les puedo asegurar (que) ninguno como este que hoy atravieso. Soy fiel creyente de que el amor lo puede todo, perdonar, continuar y no dañar. Es por esto que comparto mi sentir antes de partir”.
[quote]La excompañera sentimental del artista agregó que “conocí a un hombre al que amaré siempre. Fuimos conocidos, amigos, compañeros de trabajo y fieles amantes por mucho tiempo. A su lado he compartido momentos gratos y otros no tan gratos. De igual forma, ambos hemos crecido y aprendido durante el proceso y hoy sé que no hay fortaleza alguna en mí para continuar este tormento que en este momento ambos vivimos”.[/quote]
Luego, señala en su escrito que “siento demasiada presión y ya no soporto en lo que esto se ha convertido ni un solo día más. Al menos yo no puedo permitirme hacerle daño a quien quiero. Mucho menos intervenir con su carrera por la que, independientemente, tanto ha luchado. Todos cometemos errores y mi corazón no me lo permite”.
La mujer enfatiza que “en mí solo existe perdón. Así soy yo y quienes me conocen de verdad saben que es cierto. No puedo continuar siendo parte de este proceso. Hoy me mata la incertidumbre de lo que pueda ocurrir y más daño me hace saber que puedo privar de su libertad a este hombre. Estoy enfermando y no es saludable para nadie. Menos para mi familia”.