[dropcap]N[/dropcap]ueva víctima al ‘Efecto Zellweger‘. Después de que Reese Witherspoon, Nicole Kidman y Catherine Zeta-Jones se sometieran al bisturí para retocar su rostro en exceso, como ‘popularizó’ Renée hace más de un año, ahora el mundo celebritie se cobra un nuevo nombre que ha sucumbido a los retoques estéticos.
Meg Ryan se ha convertido este martes en el centro de atención de los medios tras aparecer a un desfile de la Alta Costura de París con una nueva cara.
La actriz fue un icono de la belleza natural durante los 90, pero parece ser que ha decidido dejar atrás lo que más la caracterizó para ‘mejorar’ en el quirófano.
Los focos se han puesto sobre Ryan esta misma mañana, después de que la artista se dejara ver en el desfile de Georges Chakra, en el marco de la Paris Haute Couture. Por sorpresa de todos, la protagonista de Tienes un e-mail apareció con un rostro totalmente distinto al que ‘enamoró’ a Tom Hanks en el filme, y no por el paso del tiempo, sino por el paso por el bisturí.
Con la piel mucho más tersa, los ojos más rasgados y pequeños y una barbilla más estilizada, Meg Ryan ya no parece la que era. Sus más fieles seguidores han lamentado su transformación, dejando claro en redes sociales que estaba mucho mejor antes de operarse.
¡Pero.. Meg!
