Ezrah “Tiburón” Dormon tiene 12 años. No tiene edad para hacerse un tatuaje, pero eso no le impide tatuar a otras personas.
Este jovencito vive en Panamá y la primera vez que quiso ser tatuador fue cuando vio a su madre hacerse un tatuaje en el estudio Honolulu. Viendo el interés del chico, el dueño, Ali García, le permitió rellenar parte del tatuaje (con permiso de la madre, claro) y desde entonces, Ezrah está enganchado.
Ya ha tatuado a unas 20 personas, además de incontables naranjas y pomelos (al parecer son buenos para practicar). Todo en el estudio Honolulu donde estudia como aprendiz de García. El dueño le ha enseñado a dibujar distintos diseños, como panteras, golondrinas, serpientes, rosas y tiburones (que se han convertido en los favoritos de Ezrah). ¡Ha tatuado hasta a su profesora de matemáticas! Aunque no hay duda de que el niño tiene talento, no a todo el mundo le parece bien que use la pistola de tatuar a su edad.
Mira su trabajo:
¡Increíble!
Fuente: Bored Panda.