En una entrevista con Andy Cohen, la empresaria Kim Kardashian confesó que tras el traumático incidente en Paris, se rehúsa a guardar objetos de valor en la caja fuerte de su mansión por miedo a ser víctima de otro posible robo.
Hace cinco años la modelo fue amenazada con un arma en su habitación de hotel para robarle las joyas valoradas en 10 millones de dólares que había llevado al viaje por lo que la famosa cambió su estilo de vida.
Kim explicó que dejo de realizar publicaciones en tiempo real en sus redes sociales, pues esto puede ayudar a cualquier potencial ladrón a localizarla, además de reforzar la seguridad en torno en su hogar.
Por otro lado, la socialité reveló que llego a desarrollar una especie de fobia a los diamantes porque los asociaba con esa dura experiencia, ni siquiera trató de reemplazar los que había pedido, aunque recién los ha vuelto a usar, siempre y cuando no sean suyos.
«En lo que respecta a las joyas, si llevo alguna, siempre son prestadas. O falsas. En mi casa no entra nada caro. Hago que el equipo de seguridad me lo quite todo antes. No puedo dormir si hay joyas guardadas en la caja fuerte, o dinero o cualquier otra cosa», señaló.