El Santuario Mariano Diocesano Nuestra Señora de Fátima, ubicado en Carrizal, cerró el año 2025 consolidando su papel como centro de peregrinación, promotor de tradiciones y eje de acción social en la región. Durante los últimos meses, el templo ha sido escenario de encuentros religiosos, homenajes culturales y actos solidarios que han fortalecido los lazos comunitarios y profundizado la fe de los fieles.
Uno de los hitos más destacados fue la coronación simbólica de la Santísima Virgen de Fátima, celebrada el 13 de octubre. La ceremonia coincidió con el tercer aniversario de la consagración del Santuario y contó con la presencia del Cardenal Baltazar Porras. La corona, obra de la orfebre Miriam Chacón, representó la devoción y el compromiso de la comunidad portuguesa, pilar fundamental en la historia del templo.
Los tradicionales arraiales también marcaron el año, reuniendo a cientos de personas en jornadas de oración, reflexión y celebración. El Arraial de La Candelaria, por ejemplo, integró por primera vez las tradiciones canarias y portuguesas, ofreciendo una experiencia única de gastronomía y espiritualidad. Asimismo, el arraial 53, en octubre, homenajeó la consagración del templo y la coronación de la Virgen, cerrando el año con un ambiente de unidad y gratitud.
Además de lo religioso, el Santuario impulsó iniciativas sociales y educativas. En julio, junto a Cáritas La Natividad del Señor, entregó ayuda humanitaria a familias afectadas por las lluvias en la región andina, con medicamentos, alimentos y enseres recolectados en la campaña «Los Andes nos necesitan». También fue sede de la Octava Asamblea Diocesana de Oración Carismática, reuniendo a cientos de fieles para un día de renovación espiritual, y celebró la graduación de 72 estudiantes de portugués, impulsando la formación cultural en la comunidad.

