Pelo Malo, una verdad incómoda

5 min


0
68 shares

[dropcap]H[/dropcap]ablar de la que a la fecha es la película venezolana con más galardones no es trabajo fácil, uno podría cómodamente mencionar una cantidad de premios, esbozar una sinopsis del film y utilizar un puñado de frases genéricas como “crítica social” “mirada a una realidad” o “retrato de la vida del barrio” sin llegar a dar en sí con la esencia de la película.

VIDEO: Aquí puedes ver el trailer de la película

[pullquote_right]Esta no es una película fácil de mirar… porque llega a espacios íntimos y reales con temas que son incómodos.[/pullquote_right]

Esta no es una película fácil de mirar y no porque sea gráficamente desagradable, sino porque nos saca de nuestra zona de confort y llega a espacios íntimos y reales con temas que son incómodos. Más de un disociado dirá que es otra “película de barrios”, lamento desencantar tan pobre juicio pero es una película que sucede en parte, en un sector popular, pero no es una película “de barrios”, es un grave error ir predispuesto a la sala de cine.

[box_info]El siguiente artículo tiene contenido que puede ser considerado como SPOILER, así que hemos lo ocultado y sólo lo podrás ver si haces click sobre el texto borroso.[/box_info]

Pelomalofilm.com
Pelomalofilm.com

La historia va de una familia típica venezolana, sin padre, una viuda y sus dos hijos: un bebé y Junior de 9 años, el protagonista. Viven en una zona marginal, de una urbe inhóspita, sabemos que es Caracas, pero para el film no es trascendente el nombre sino el lugar y el espacio, porque sirven de contexto. [spoiler] Sin embargo, lo que constituye el eje central de la película es la relación entre Junior y Marta, su madre, que parece no sentir amor o al menos simpatía alguna por su hijo mayor por ser diferente y no un arquetipo del machito latinoamericano de clase popular, desde allí parte nuestro tren y sabemos que no va a ser un camino suave. [/spoiler]

Pelomalofilm.com
Pelomalofilm.com

[spoiler] Marta es una mujer luchadora, una sobreviviente en una vorágine de concreto y smog que debe luchar por recuperar su trabajo como vigilante, es una mujer que no exalta su feminidad, todo lo contrario es tosca, ruda y castrante. Junior es un niño rebelde, libre, sensible, delicado y se empeña en hacer su vida de acuerdo a sus sueños, lo que lo lleva inexorablemente a enfrentarse una y otra vez en una colisión constante con su madre. Estos enfrentamientos van escalando a medida que avanza la película, cada uno tratando de imponerse a su manera sobre el otro, el hijo por caminos sinuosos y la madre por medio de la dominación y la intolerancia, hasta llegar a extremos grotescos como obligarlo a mirar cuando ella tiene sexo con un hombre, un recurso de su limitado arsenal, pues ella a sabiendas de su incapacidad para manejar la situación con su hijo acude a un médico quien le aconseja “reforzar modelos masculinos” y es así como ella interpreta lo que debe hacer. [/spoiler]

[pullquote_left]La historia llena de incomodidad porque la percibimos cercana, porque conoces o has visto esos personajes en algún lado.[/pullquote_left]

Mariana Rondón nos trae o que a la fecha es su mayor logro, y habla de su film desde un punto de vista reflexivo sobre la intolerancia, así sin más, sin embargo creo que está más que claro para el espectador que se trata de la homofobia y específicamente hacia la homosexualidad infantil, un tema valiente y arriesgado, solo tengo referentes al respecto con You Are Not Alone ( Du er ikke alene, L. Nielsen y E. Johansen, 1978) que lo trató con libertad y sin adornos, 35 años han pasado para que vuelva a ser un tema que remueva sentimientos encontrados en el público mundial. La historia llena de incomodidad porque la percibimos cercana, porque conoces o has visto esos personajes en algún lado.

Pelomalofilm.com
Pelomalofilm.com

Es de aplaudir la persistencia en mantener la historia íntima y personal, escapando a retratar caricaturescamente a personajes vacuos y repetidos en las películas de temática social, el malandro bueno, el malandro malo, la puta, el marico plumífero y la madre víctima, nada nos desvía del conflicto, está presente en todo momento, siempre hay tensión. Dupla maravillosa que hacen Junior y su vecina, me recuerdan inevitablemente a personajes de Todd Solondz, es la parte sabrosa, digerible y más suave del film, nos muestra que los niños son niños independientemente del contexto donde se encuentren y su imaginación es capaz de crear juegos maravillosos sin necesidad de juguetes.

[quote]Es una puñalada constante al prejuicio y la homofobia[/quote]

La autora nos da una película inteligente en el sentido de no ser explícita en referencias de sucesos pasados o presentes, supones muchas cosas, pero no estás seguro de alguna de ellas, lo cual te lleva a pensar ¿El niño es gay o yo estoy suponiendo que es gay sólo por ser distinto? Es una puñalada constante al prejuicio y la homofobia, que está presente en todos y cada uno de nosotros en mayor o menor grado independientemente de nuestro género, pues no podemos escapar a haber crecido en una sociedad que le teme y condena todo lo que le sea distinto.

Magistralmente nos ubica usando solo 4 referencias de carácter político dentro de un tiempo específico, no abusa de ellas, no las usa de panfleto para una u otra causa, simplemente dan contexto, la lucha por la supervivencia no tiene colores políticos y eso Mariana lo entiende a la perfección. La iluminación es realmente hermosa, al igual que la fotografía muy bien realizada por Micaela Cajahuaringa, suaviza el entorno, eso sumado a unos excelentes planos hacen que cinematográficamente sea una de los grandes logros de nuestro quehacer audiovisual.

La selección de actores es impecable, no tenemos las molestas manías arrastradas por el quehacer televisivo de nuestro país, ni los falsos diálogos, excelente Samuel Lange como Junior y magistral Samantha Castillo como Marta, pocas veces se ve a una actriz local realizando un performance tan bien encarnado, no en vano se ha llevado par premios por él en Canadá e Italia.

Lo único que quizás le criticaría es que no será fácil crear un vínculo agradable con el público, es quizás muy inteligente para ello, necesitas pensar demasiado, especialmente la escena final porque quedas esperando un cierre satisfactorio y no lo hay.

Finalmente, mi recomendación es que no me crean, vayan a verla, no es una película complaciente, los mantendrá en tensión, puede que les guste, puede que no, pero no les será indiferente, saldrán hablando de ella, cosa que películas taquilleras raramente logran. Es un grito en contra de la intolerancia, uno muy necesario en este momento.


¿TE GUSTA ESTO? ¡¡¡COMPÁRTELO CON TUS AMIGOS!!!

0
68 shares

Dando de qué hablar...