Una nueva publicación reposa en el feed del Instagram de Kim Kardashian, una foto que sin duda está marcando un antes y un después, y es que para sorpresa de millones, su retaguardia no luce igual que siempre.
Kim publicó una linda foto con su hijo menor, Psalm West, de dos años; pero lo que llamó la atención fue el tamaño de su trasero.
Para los especialistas en cirugía estética, la socialité puede haberse realizado un nuevo procedimiento estético para modificar la forma de sus nalgas.
Según The Mirror, los fans de Kim fueron los primeros en notar algo ‘diferente’ sobre ella. Pero la empresaria había dicho antes que cuando pierde peso esta parte de su cuerpo también lo hace. ¿Será que ese fue el caso?
Kim siempre ha negado con vehemencia pasar por el quirófano para aumentarse el trasero. Dijo que nunca se había sometido a implantes de glúteos ni a ningún procedimiento cosmético invasivo en esa zona.
En 2014, menos de un año después de dar a luz a su hija North, Kim acudió a Twitter para poner fin a los rumores de cirugía plástica.
Ella dijo en ese momento: “Estoy mirando todos estos tabloides absurdos que dicen que tengo implantes en las nalgas… ¡Usando fotos mías 15 kilos más delgada (antes de tener a mi bebé) en comparación con mi yo de ahora! Aún tengo peso que perder”, se quejó.