A falta de cinco días, SAG-AFTRA está intensificando sus esfuerzos para prepararse para ir a la huelga, incluso mientras se intensifican las negociaciones contractuales con los grandes estudios de Hollywood.
El jueves, SAG-AFTRA distribuyó una encuesta a sus 160.000 afiliados y les avisó de que el sindicato iba a pedir voluntarios para ayudar a hacer pancartas, trabajar en bancos telefónicos, distribuir camisetas y, en general, apoyar una movilización de piquetes en las calles de Los Ángeles, Nueva York y otros lugares seleccionados. El mensaje de correo electrónico incluye una encuesta sobre la disponibilidad de los afiliados para hacer piquetes ante las puertas de los estudios, las oficinas de Nueva York y otros lugares clave. La comunicación del jueves era la segunda parte de las preguntas de la encuesta inicial enviada a los afiliados el miércoles.
Los miembros de SAG-AFTRA ya han acudido en masa a los piquetes organizados por Writers Guild of America, que se declaró en huelga el 2 de mayo. Muchos miembros de base de SAG-AFTRA están entusiasmados con los temas que están sobre la mesa en esta difícil temporada de negociaciones laborales en Hollywood. Por el contrario, el Sindicato de Directores de América ha ratificado un nuevo contrato de tres años en un acuerdo alcanzado el mes pasado sin mucho drama.
SAG-AFTRA lleva negociando con la Alliance of Motion Picture and Television Producers de forma intermitente desde el 7 de junio. El contrato más reciente del sindicato expiró el 30 de junio. SAG-AFTRA acordó la semana pasada ampliar el plazo de las negociaciones hasta la medianoche PT del 12 de julio.
SAG-AFTRA y AMPTP han acordado un bloqueo mediático mientras duren las negociaciones. Fuentes familiarizadas con la situación dijeron que las conversaciones han sido difíciles ya que el sindicato ha puesto una larga lista de temas sobre la mesa y han tardado en dar prioridad a los que rompen el acuerdo en el grupo.
No es ningún secreto que SAG-AFTRA busca que los estudios y los streamers establezcan protecciones para los actores frente a la amenaza tecnológica que supone la inteligencia artificial generativa. El sindicato también está presionando para que se aumenten las tarifas residuales de las plataformas de streaming y para que se aborde el aumento de las audiciones autograbadas, que hacen recaer sobre los actores la carga de la producción de vídeo.
Los líderes de SAG-AFTRA, Duncan Crabtree-Ireland y Fran Drescher, aumentaron las esperanzas de la industria de evitar una doble huelga histórica a principios de la semana pasada, cuando la pareja ofreció una evaluación optimista de las conversaciones en un mensaje de video enviado a los miembros el 24 de junio.
«Sólo quiero asegurarles que estamos manteniendo unas negociaciones muy productivas centradas en todos los temas cruciales que nos han dicho que son los más importantes para ustedes», dijo Drescher, presidenta del sindicato. «Nos mantenemos firmes y vamos a lograr un acuerdo seminal».
Pero ese positivismo dio un giro a finales de semana, cuando un grupo de destacados actores pidió a los líderes de SAG-AFTRA que se mantuvieran firmes y estuvieran dispuestos a ir a la huelga para conseguir importantes logros contractuales. La propia Drescher acabó firmando la carta respaldada por Meryl Streep, Jennifer Lawrence, Amy Poehler, Quinta Brunson, Laura Linney, Ben Stiller y Constance Wu, entre otros cientos de firmantes.