El oscarizado director Guillermo del Toro no está muy preocupado por la inteligencia artificial y su impacto en la creación de contenidos de entretenimiento.
Evidentemente, lo que le quita el sueño es la gente. «La gente me pregunta si me preocupa la inteligencia artificial, yo digo que me preocupa la estupidez natural. Es sólo una herramienta, ¿verdad?», dijo el director de Pinocho y La forma del agua durante un discurso de apertura en el Festival de Cine de Toronto el viernes.
«Si alguien quiere películas hechas por IA, que las consiga inmediatamente. No me importa la gente que quiere sentirse satisfecha y obtener algo de mierda, rápidamente», dijo, argumentando que la IA tendría éxito o moriría en función de lo que la gente hiciera con ella creativamente para llevar una visión personal a una pantalla.
«Si no, ¿por qué no comprar una impresora, imprimir la Mona Lisa y decir que la has hecho tú?», dijo del Toro durante su aparición en Toronto, que formaba parte del programa TIFF Visionaries patrocinado por The Hollywood Reporter.
El jueves por la noche, del Toro hizo una aparición sorpresa al presentar la película de animación de Hayao Miyazaki, El niño y la garza ante el público de la primera noche del TIFF en el Roy Thomson Hall. Un día después, habló de su pasión por la animación dibujada a mano, la animación stop-motion y otros mundos fantásticos. «Por alguna razón, en Occidente se considera que la animación es para niños y no un medio para el arte puro y la creación pura», dijo del Toro.
Señaló que Canadá y Toronto, donde reside, tienen un arraigado amor por la animación que se remonta a los primeros días de la National Film Board of Canada. «Me gustaría que la gente entendiera que es un medio y no un género. Algunas de las películas más importantes se han hecho en animación», insistió.
El maestro del cine de terror dijo que la animación sigue siendo en gran parte dibujada a mano y creada y producida por humanos. «Incluso lo que llamamos animación por ordenador. No lo es. Son figuras que tienen que ser animadas y es una transmisión directa de la personalidad del animador al modelo, y el stop-motion es lo más promiscuo de todo eso», dijo del Toro sobre la gente en el plató jugando con juguetes delante de una cámara.
El Festival de Toronto continúa hasta el 17 de septiembre.