Se dice que casarse implica un cambio radical de vida, y en el caso de la prometida del príncipe Harry, Meghan Markle es un cambio radical, por eso puso a la venta la casa que alquilaba en Toronto, Canadá.
La modesta vivienda de dos pisos está valorada por USD 1,395 millones, y es la residencia que usaba la actriz por las filmaciones de la serie Suits, a la cual renunció para ser parte de la realeza británica.
La antigua casa que Markle rentaba se encuentra en Seaton Village, al oeste del centro de Toronto. Tiene tres dormitorios, dos baños y un garaje para dos carros.
Daniel Freeman, de Freeman Real Estate, le dijo a The Globe and Mail que hay muchos curiosos que quieren conocer la propiedad debido a que allí estuvo el nieto de la reina Isabel II. Es que fue en este departamento donde el romance entre ambos floreció, ya que Harry solía visitar Yarmouth Road hasta dos veces al mes.
La sencilla casa está muy lejos de la nueva residencia de Markle en los terrenos del Palacio de Kensington, donde vivirán los futuros Duques de Sussex.
