La sexta temporada de Lucifer robó su historia de The Flash

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La temporada final de Lucifer tomó una página de The Flash con uno de sus principales giros; un nuevo personaje, que era secretamente la hija de Chloe y Lucifer del futuro. Originalmente, la temporada 5 de The Flash introdujo el personaje de Nora West-Allen, que era la hija de Barry Allen desde 30 años en el futuro. Sin embargo, a pesar de los giros similares, los personajes y sus motivaciones para viajar en el tiempo para encontrar a sus padres eran bastante diferentes.

Al comienzo de la sexta temporada de Lucifer, el antiguo gobernante del Infierno intentaba disfrutar de sus últimos días en la Tierra antes de ascender al trono del Cielo y convertirse en Dios, tras la retirada de su padre. Estos planes quedaron en suspenso después de que Lucifer se enfrentara a un joven ángel llamado Rory (Brianna Hildebrand) al que no reconoció, que tenía el asesinato en mente. Afirmó que Lucifer la había engendrado y que la había abandonado a ella y a su madre, lo que llevó a Lucifer a empezar a investigar a todas las mujeres con las que había estado y que luego tenían una hija de la edad adecuada. No fue hasta más tarde, cuando el joven ángel se enfrentó a Chloe, que se reveló que ella era la hija de Chloe y Lucifer y que de alguna manera desarrolló el poder de viajar en el tiempo justo después de la muerte de Chloe en el futuro, después de enfadarse increíblemente porque Lucifer no se molestó en mostrarse ni siquiera en los últimos momentos de vida de Chloe.

La idea de una hija que viaja en el tiempo también fue una parte importante de la quinta temporada de The Flash. Viajando desde el año 2049 y tomando parte en la batalla de su padre con el Pensador, Nora West-Allen (Jessica Parker Kennedy) desató accidentalmente un efecto mariposa que la dejó incapaz de volver a su tiempo. Los eventos de la temporada vieron a Barry Allen conocer a la hija que creció sin él, antes de que se revelara que era un peón del Reverse-Flash y parte de su plan para liberarse de la prisión que lo retenía en su tiempo.

Aunque sus conceptos básicos son idénticos, Rory y Nora son personajes muy diferentes. Nora creció con una visión idealizada de Barry Allen como un gran héroe cuya muerte durante Crisis en Tierras Infinitas salvó el multiverso. Por el contrario, Rory odiaba a su padre y lo veía como un cobarde que la abandonó a ella y a su madre porque tenía miedo de las responsabilidades de la paternidad. Esto era un reflejo irónico de las preocupaciones de Lucifer por convertirse en Dios (y padre de toda la realidad) y alejarse cada vez más de Chloe debido al trabajo requerido.

Otra diferencia clave es que Rory no tenía ni idea de cómo era capaz de viajar en el tiempo, adivinando que tenía algo que ver con su rabia y el deseo de matar a su padre muerto llevándola hasta él en el último lugar donde sabía que estaba en la Tierra. Nora, por el contrario, mostraba un mayor grado de control sobre sus poderes y conocía la teoría de cómo viajar en el tiempo con supervelocidad, aunque ya no tuviera la velocidad para hacerlo. Aunque es probable que el punto de la trama no fuera un homenaje intencionado, no deja de ser interesante cómo Lucifer y The Flash desarrollaron la misma idea de formas diferentes.


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